Como no había nada mejor que hacer, nos dedicamos a labores de mantenimiento de nuestro vehículo.
Con nuestro conductor suplente, Jose María del Águila, estuvimos haciendo prácticas de arranque.
Además, nos visitaron varios equipos de jueces de la organización.
Todos se llevaron un bonito recuerdo de nuestras tierras, y la simpatía de nuestro equipo.
Como estaba lloviendo, nos fuimos a la tienda del catering, y allí pudimos ver imágenes entre las que estaba nuestro Lince y nuestro conductor:
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